TRISTE REALIDAD CON LA JUVENTUD ACTUAL

Triste realidad con la juventud actual. Cuál es el problema con la juventud?

Como decía una canción de los años 80, de cuyo título y artista/grupo no recuerdo, la edad media de los soldados en la segunda guerra mundial era de unos 25 años, durante la gerra de Corea se estableció en 21 años y durante la guerra de Vietnam, la edad promedio era de 19 años.

Actualmente vivimos crueles guerras “dejadas en manos de Dios” que no son radiados partes de guerra como antiguamente a la usanza, nos hacían engullir a diario. Solo si algún reportero suicida y cazador del Pulitzer de fortuna, son los que mandan via “freelance” a los diferentes noticiarios del mundo, a cual mejor postor, para ser publicado en horario de mayor atención y con las victimas propicias para recaudar audiencia. Se han profesionalizado en buscar los nuevos soldados, La edad mínima de algunos combatientes no pasa de los 10 años. Las victimas como siempre son los más débiles, los que no pueden defenderse. Pero también son los principales actores que necesitan los noticiarios, vender carroña se ha vuelto un negocio de masas.

Ya no tenemos cultura de la compasión ni del respeto hacia los demás, ya no aparecen nuevos avisos de fechas anunciando el “fin del mundo”. ¿Será que estamos realmente entrando en ese fin del mundo?. ¿Globalizar y compartir se esta convirtiendo en un arma contra la sociedad?. No debemos menospreciar la juventud solo por tener variedad de malos ejemplos. Los jóvenes son hijos nuestros, aun somos jóvenes “carrozas”, viejos y supuestamente sabios padres. Todavía somos dueños de dar esperanza y respeto para retroalimentar a nuestros jóvenes en valores para tomar el buen camino. Vamos a parar con dejarles que se busquen la vida si los jóvenes de hoy cometen errores, no impidamos por negligencia que lo tomen en cuenta y cambiarán la actitud y asumirán la responsabilidad necesaria. Yo si tengo mucha fe en la juventud, pues yo mismo lo fui.

El problema de la juventud actual es que tienen acceso a una cantidad de contenidos casi ilimitados, pero en los que se están dejando de lado los valores personales y sociales. Hoy nos olvidamos de ir inculcando valores a los niños y a los jóvenes. Preferimos que sean autosuficientes, que su tiempo de “absorber” conocimientos, no sea ocupar mi tiempo. Y en el momento que tienen acceso a la información, se ven expuestos a una cantidad de contenidos que sin el discernimiento correcto, los convierten en sabedores y dueños omnipotentes de su propias ideas de lo que es el mundo. Se convierten en seguidores pasionales de movimientos no culturales, modales y sin contenido, una cantidad de jóvenes que creen que lo mas importante de la vida es verse bien, incluso a cualquier precio, pero que en su cerebro no tienen nada mas, de seguir así iremos poco a poco hasta el ocaso de la civilización.